Malta disfrutó de su Semana del Diseño. Su sede, el famoso Fuerte de Saint Elmo, en Valletta. Esta segunda edición fue aún más grande e imponente.Dos mil personas se hicieron presentes en su día inaugural. Estaba atestado de gente, todos demostraban su interés. Lo más admirable era la gran cantidad de familias con sus niños que visitaban las instalaciones. El año pasado en cambio, la mayoría de los visitantes eran personas vinculadas a la industria del diseño.
El Fuerte se dividió en dos niveles, con cuarenta stands de distintos presentadores. Todos muy cómodamente ubicados. El marco histórico era impagable, daba su toque único al evento. Entre los concurrentes, había una mezcla de profesiones y actividades: ingenieros, diseñadores de interiores, diseñadores gráficos, emprendedores comerciales y por qué no, artistas. Entre los temas exhibidos destacaban las artes visuales, la decoración de interiores, con estilos como el avant-garde o el clásico más absoluto acompañados por música acorde con la ocasión. El conjunto daba una experiencia inolvidable para los sentidos.
Uno de los puntos más altos fue la Capilla, reconstruida para la ocasión, la que fuera escenario del Gran Sitio, cientos de años atrás, en épocas de batallas y luchas interminables por la posesión de la isla. El escenario no podía ser más impresionante.
Increíble fue “Ciudades Invisibles”, una interpretación fotográfica de extractos tomados del famoso trabajo de Italo Calvino, hecho por alumnos de la Facultad de Medio Ambiente.
De esta forma, las obras literarias del gran autor italiano se veían recreadas desde un punto de vista arquitectónico, lo que frecuentemente resultaba bastante oscuro.
La moda también se hizo presente, gracias al trio Sunskrit, Churpina y Pina, quienes presentaron un diseño de alta costura, inspirado en el pasado, presente y futuro de Malta.
Además de los productos exhibidos, se dieron charlas y otras presentaciones. Pero la muestra no estaba asentada solamente en el Fuerte, sino que se prepararon cuatro muestras satélites en las cercanías.
Vía e imagen: Times of Malta